¿Cómo maquillamos y desmaquillamos nuestro rostro correctamente si tenemos la piel con acné?

¿Cómo maquillamos y desmaquillamos nuestro rostro correctamente si tenemos la piel con acné?

A la pregunta ¿Podemos maquillarnos cuando sufrimos acné o nos puede hacer más daño?

¡La respuesta es que sí! Podemos usar productos de maquillaje, pero es muy importante lo que usamos. Los productos deben elegirse con mucho cuidado para no agravar más el acné. La mayoría de los productos de maquillaje obstruyen los poros y predisponen la aparición de acné. Por ello es necesario leer los envases para conocer los ingredientes antes de introducirlos en nuestra rutina diaria.

Los productos en general

Tanto las cremas y los sérums, como los productos de maquillaje de cualquier tipo, ya sean bases, correctores, polvos, etc., deben tener escrito en el envase: libre de aceite, no comedogénico o no bloquea los poros. Solo estos productos pueden usarse en pieles con problemas de acné y con tendencia acneica. También hay algunas bases que están diseñadas específicamente para pieles con acné, productos que también contienen algunas sustancias que pueden ayudar a tratar el acné, como por ejemplo el ácido salicílico.

El acné cosmético

Como su nombre indica, el acné cosmético es causado por los cosméticos como cremas, maquillajes o cualquier otro producto aplicado en la piel que pueda dar lugar a la aparición de granitos. A menudo estos productos bloquean los poros e inducen la formación de microcomedones y comedones. La desventaja es que pueden aparecer inmediatamente o después de un período de tiempo más largo desde la primera aplicación (a veces incluso meses), y en la mayoría de las veces sin poder identificar con precisión el productos «responsable». En este tipo de acné, tras retirar los productos de tu rutina diaria, pronto notarás la desaparición de las espinillas y la vuelta a la normalidad.

Nuestro consejo

Para evitar una aplicación agresiva de los productos de maquillaje en el rostro, se recomienda utilizar brochas de maquillaje. Usados regularmente, además de las partículas de maquillaje, también contiene restos de células y sebo. Por ello, hay que limpiarlos periódicamente – se recomienda una vez por semana, para no obstruir los poros y predisponer a las lesiones de acné.

Desmaquillar es otro proceso importante en nuestra rutina diaria que debemos realizar correctamente. Si no logramos desmaquillarnos, por desgracia, los poros se obstruirán con mucha más facilidad y aparecerán microcomedones. Lo ideal es limpiarnos la piel por la mañana y por la noche para desobstruir los poros, pero sobre todo por la noche para desmaquillarnos y eliminar impurezas.

Nuestra rutina para desmaquillar

Un primer paso sería desmaquillarnos con un gel limpiador, jabón con partículas de carbón activo, o bien con espuma limpiadora según nuestro tipo de piel, si es mixta/ grasa o secas/muy seca. Es importante no olvidarnos de este paso tan importe y usar el producto limpiador adecuado y suave, para no irritar la piel. Un producto suave, adaptado a las pieles con tendencia acneica, es suficiente para eliminar y limpiar el sebo, las impurezas y los restos de partículas de suciedad que quedan en el rostro. Siguiendo estos pasos, desaparece el riesgo de que te salgan granitos por una limpieza inadecuada de la piel.

Una buena pre-base

No olvidemos también después de nuestra limpieza y antes de maquillarnos, aplicar una buena base de crema No comedogénica. Nos servirá como una perfecta pre base para nuestro maquillaje, va a alargar la duración del mismo y muy importante, nuestra piel va a respirar con normalidad porque las cremas no comedogénicas no obstruyen los poros. Fundamental para las pieles con problemas de sequedad e infecciones como el acné ya que tampoco producen exceso de grasa, son poco grasas y el efecto que tienen es que ayudan a la piel regular el exceso de sebo.

Otras factores que debemos controlar

Durante la pandemia de Covid19, cuando la mascarilla se volvió obligatoria, apareció una erupción acneifome, llamada «masckne». Esto se debe a la fricción de la máscara sobre la piel junto con el exceso de sudor y sebo en la piel cubierta por la mascarilla. Estos factores combinados con el maquillaje pueden bloquear aun más los nuestros poros , a pesar de uso de productos correctos. Sin embargo debemos considerar renunciar al maquillaje y aplicarlo solo si es absolutamente necesario. Preferiblemente, usar una crema hidratante adaptada a su tipo de piel para protegerla debajo de la mascarilla. Además tratamiento y otro tipo de ingredientes más específicos debemos usar por la noche, para no irritar la piel durante el día.

Conclusión

Es decir, se puede maquillar la piel con tendencia acnéca si se utilizan productos adecuados que no obstruyen los poros y se sigue estrictamente la limpieza facial adecuada de la piel.