Gracias a un gran número de seguidores en las redes sociales, la estrella de la niacinamida se ha elevado como una supernova en el firmamento de los cosméticos imprescindibles. Sin embargo, lo cierto es que es muy conocido por los dermatólogos desde 1935-1937 y es un veterano en muchos productos cosméticos. Hay varias razones sólidas por las que tiene un papel importante en su composición, que le revelaremos en las siguientes líneas: qué es, cómo funciona y si hay algún tipo de piel al que no pueda ayudar.
La vitamina B3 es uno de los nombres con los que se la conoce, y la podemos encontrar en la etiqueta bajo el nombre de nicotinamida. Es soluble tanto en agua como en alcohol y tiene un peso molecular bajo.
Entre sus principales prioridades está apoyar la renovación de la capa superficial de la piel, contribuyendo así a la preservación de la humedad en profundidad; contrae visiblemente los poros dilatados, evitando que se llenen; actúa contra la inflamación del acné y restaura la piel, junto con la frescura y uniformidad de su tez.
Este potente y multifuncional ingrediente, que ayuda a proteger la piel y la protege de los radicales libres, se obtiene de forma sintética. Está presente en productos antiacné, a menudo en compañía del ácido salicílico, pero también es un buen aliado en el tratamiento de las manchas pigmentarias, que suelen aparecer a finales de verano.
La niacinamida es una excelente compañera: tiene la propiedad única de combinarse perfectamente con la mayoría de los ingredientes activos de los cosméticos, incluidos retinoles, péptidos, ácido hialurónico, AHA y BHA, e incluso vitamina C y antioxidantes.
El secreto de su éxito reside en su excepcional tolerancia: es igualmente bien recibido por todo tipo de pieles:
También es apto para todas las edades. A diferencia de otros ingredientes activos populares, como el retinol, por ejemplo, que deben introducirse gradualmente en la rutina de belleza, la piel se adapta rápida y fácilmente a la niacinamida y se absorbe bien en cualquier forma: crema, tónico o suero.
El contenido de niacinamida depende directamente de si es el principio activo principal o en combinación con otros, como la vitamina C, por ejemplo. Para un efecto calmante y antiinflamatorio, una concentración del 2% es más que suficiente.
Si se utiliza como agente antipigmentación, su contenido se puede aumentar hasta el 5%. Las concentraciones más altas, del 5 al 10%, se reservan para su uso en la lucha contra el acné. Sin embargo, se debe tener cuidado: porcentajes demasiado altos pueden causar enrojecimiento de la piel no deseado, ya que la niacinamida tiene la capacidad de dilatar temporalmente los vasos sanguíneos.
Si recién lo estás añadiendo a tu rutina, es bueno apostar por una concentración menor del 1 al 5%, y si tu piel es más madura o ya está acostumbrada al ingrediente, también puedes apostar por productos con hasta un 10%. contenido.
Si por alguna increíble razón aún no tienes cosméticos con niacinamida añadida, no dudes en incluirla en tu cuidado diario, comprobando primero cuál sería la concentración adecuada para tu piel. Aporta muchos beneficios a su apariencia, pero por muy mágicas que sean sus propiedades, sólo una cosa le garantizará excelentes resultados: sea diligente en su rutina y acerque con paciencia los resultados que espera de los productos elegidos.